Clasificación de obras por extensión

Curioseando sobre el tema, y visto en la wikipedia:
en.wikipedia.org/wiki/Fiction

Types of prose fiction:

- Flash fiction: A work of fewer than 2,000 words. (1,000 by some definitions) (around 5 pages)
- Short story: A work of at least 2,000 words but under 7,500 words. (5–25 pages)
- Novelette: A work of at least 7,500 words but under 17,500 words. (25–60 pages)
- Novella: A work of at least 17,500 words but under 50,000 words. (60–170 pages)
- Novel: A work of 50,000 words or more. (about 170+ pages)
- Epic: A work of 200,000 words or more. (about 680+ pages)

Lo normal para un relato pulp es que éste se mueva entre las 5000 y las 7000 palabras más o menos. Y en cuento a las novelas de bolsillo, o novela barata de toda la vida, el bolsilibro, pues sobre las 50.000 y las 70.000 palabras, así a ojo. Y además estas son mis extensiones preferidas. tanto para lo uno como para lo otro, aunque logicamente todo esto es muy relativo.

A esto hay que añadir la nueva modalidad que está arrasando entre los que dominan poco las letras: el microrelato, con extensión máxima de 20 renglones.
Si os fijáis, en los certámenes abunda esta modalidad, que va tomando rumbo al Twitt Relato, 150 palabras, donde se hacen las delicias a la democratización de la literatura.
Si me permitís la osadía, os mostraré un ejemplo de microrelato:

Hola a todos, os presento el microrelato con el que quedé el primero en el reciente certámen de la universidad de Milkatonic al mejor microrelato sin éxito:
Había sido una noche gloriosa. Debió ser mi traje nuevo de Hugo Boss. El portero de la disco me franqueó la entrada como a un VIP, en la barra me invitaron a copas y en la pista se me acercaron bellas mujeres, que danzaban y se retorcían como serpientes entorno mío; sólo tuve que elegir a una. De ahí directo al hotel, donde había reservado una habitación en previsión de un posible éxito amoroso.
La cosa marchaba sobre ruedas, mi conquista me facilitaba la tarea, desvistiéndose rápidamente. El Strip-Tease me pareció algo largo por la multitud de prendas y accesorios que se iba quitando, pero lo atribuí a las copas de más.
La pesadilla empezó cuando me desperté después de una intensa sesión de flexiones. Estaba aturdido por la resaca. De camino al baño vi las prendas de la dama, tiradas por el suelo: zapatos de plataforma, un sostén, unas medias, una faja, una peluca, pestañas postizas sobre la mesilla, cuatro uñas de porcelana por la alfombra, la dentadura en agua, un ojo de cristal al lado y de la sorpresa por poco me mato con una pata de palo...¡Dios mío, qué horror! pensé cuando la miré, allí tendida, medio metro más baja de lo que recordaba, panzuda, medio calva, desdentada y con las tetas hinchadas como balones.
¡Me había acostado con la mujer de Mister Potato! ¡Menos mal que al menos no era un travelo!

Un saludo.

No está mal, jajajaj, espero que no esté basado en una experiencia propia

Aunque para microrelato incluso puede que sea largo.

En cuanto a los concursos, es obvio que la mayoría tiendan a limitar el número de palabras, rebajándolas todo lo posible. Y la expliación es muy sencilla, cuanto más corto, más fácil y rápido de evaluar y o juzgar, menos medios se necesitan. Economía de medios le llaman.

Y ya que sacas el tema de los microrelatos, un apunte. Si eres escritor, y quieres ganarte un sobresueldo, olvidate de los concursos de relato, y novela. Los de microrelatos son infinitamente más rentables. A donde vamos a parar... Aunque esto merecería una crítica aparte.

¡Ajena pero cercana! Solo que al final sí era un travelo.
Tienes toda la razón, actualmente casi todos los certámenes literarios son de relato corto o micro-relato.
¿Os imagináis un Conan o un Cthulhu en 20 líneas? Vamos, que saca la espada, corta la cabeza del brujo y fin...

Para el escritor de concursos, está claro, el microrelato es el mejor pagado en relación esfuerzo / beneficio. Y en cuanto a las experiencias personales como fuente imprescidible de toda escritura que se digne, cuantas más mejor, aunque sean desagradables, como la que apuntas, que, como se suele decir..., fue un amigo que me contó...

Pero yo no he dicho que fuera un amigo el que me lo contó...Jijiji.