Frozen (2010). Bajo Cero¿Desde cuánta altura eres capaz de tirarte, sin morir en el intento?

Bajo mi punto de vista, como experto y profesional crítico de cine que soy, podría clasificar las películas según tres criterios irrefutables; uno, aquellas con las que me quedo dormido; dos, las intrascendentes —películas que caen en el olvido mucho antes de que terminen, aunque te la hayas tragado entera—; y tres, aquellas otras que, una vez concluyen, siguen dándote vueltas en la cabeza, e incluso te obligan a buscar opiniones en foros, en páginas webs, y donde haga falta con tal de saber más, o de compartir tu punto de vista. Dentro de este último grupo podría incluir el título que hoy saco a la palestra: Frozen (2010) —A.K.A. Bajo Cero—, una típica producción americana que aun sin ofrecer nada nuevo, y aun siendo una producción de las baratas, consigue mantenerte en vilo hasta el final.

Según opiniones leídas por la red es todo un calco de Open Water, y puesto que dicho título nunca lo había visto, he decidido hacerlo antes de escribir la presente crítica. Aclarar, antes de nada que estoy hablando de la segunda parte de Open Water (A la deriva, 2006), y con respecto a ésta, pues sí, he podido constatar que ambas son la misma película, solo cambia la situación. Todo es igual, desde la estupidez de los protagonistas para verse envueltos en semejante despropósito, pasando por el falso rescate que pasa de largo, hasta el dramático final. De las dos la que más me ha gustado es Frozen, porque transmite una sensación de angustia mucho más intensa, al menos desde el punto de vista del espectador. La muerte semeja más cruel en Frozen, aunque ambas situaciones sean igual de horribles, solo que el agua es como si lo tapase todo.

Como decimos, este tipo de películas sigue al pie de la letra un esquema tan básico como efectivo, y lo único que cambia son las situaciones o circunstancias; unas veces es un ascensor (Vacio, 1984) —aunque quizás ésta no tenga mucho que ver, pero es la primera que se me ocurre—, otras es el ancho mar (Open Water II), otras un ataúd (Enterrado, 2010) y otras, como el caso que nos ocupa, un telesilla (Frozen, 2010). ¿Se os ocurre alguna otra digna de mención? (¡Ojo, spoiler a continuación!).

En Frozen sobre lo que se hace hincapié es la mezcla de altura, sangre y nieve. Aunque lo verdaderamente sorprendente es que apenas se ve una gota de sangre. No es una película gore, en absoluto, y en cambio sí desprende esa sensación en todo momento. Terrible la imagen en que uno de los protagonistas se rompe las piernas, y lo más terrible no es ésta en sí misma, que apenas se ve nada, sino el hecho de que sabes que se va a producir, y los segundos antes en los que está que si me tiro, que no me tiro, son los verdaderamente terribles. Quizás esa sea la mejor fórmula para crear angustia en el espectador, saber lo que va a pasar, algo que, curiosamente, en otras películas podría aburrirnos por predecible, aquí genera angustia, mucha angustia.

Los survival bien llevados son aquellos que hacen que te comas la cabeza una vez termina la película, y Frozen es un claro ejemplo. La trama no puede ser más sencilla, y si estáis buscando algo novedoso o espectacular, mejor olvidaros del asunto, sin embargo, estos han sido los noventa minutos más angustiosos que he pasado en bastante tiempo, porque eso es precisamente lo que transmite la película: Angustia.

Estar atrapado y saber que la muerte tan solo es cuestión de tiempo, y que la única cosa que puedes hacer es escoger entre morir congelado, o devorado por los lobos, o romperte la crisma en un ostiazo de órdago, debe de ser algo jodido, muy jodido.

Nunca me han hecho mucha gracia los dichosos telesillas, aunque debo reconocer que lo más cerca que he estado de uno en mi vida ha sido en esta película, pero si algo tengo claro es que ahora ya con más razón puede que no me suba a uno nunca jamás. Cierto es que los chicos de la película representan el mejor ejemplo de la estupidez humana, pues solo a alguien tan estúpido se le puede ocurrir subir a una montaña en plena tormenta, de noche, y a pocos minutos de que cierren la estación, pero claro, si no lo hacen no tendríamos película.

Lo que viene después estaba cantado. Los tres muchachos ahí suspendidos en la telesilla y a pasarlas putas, no hay otra. Aquí la cuestión es pensar en lo que haríamos nosotros en una situación similar. Solo hay dos opciones, o bien aguantar y esperar, opción estadísticamente más favorable —esto me lo acabo de inventar—, o bien “hacer algo”.

El juego de roles queda patente en la película. Son los chicos los que intentan hacer algo, y son los chicos los que la palman. En fin…, no haremos comentarios que si no me tildan de machista.

Pensar en posibles soluciones desde la comodidad de mi silla reclinable es todo un alarde de capacidad física e intelectual, justamente tal como si estuviéramos en vivo y en directo; pues no, la cosa cambia mucho. Supongo que en realidad nadie sabría lo que haría en una circunstancia como la que se presenta en la película, pero no está de más darle algunas vueltas al coco que piensa, o al menos lo intenta.

Bien, la primera reacción es la de saltar. Esto es típico de personas impacientes, impulsivas, arriesgadas, valientes, pero también puede que muy estúpidas. En ningún momento sabemos la altura a la que se encuentran los muchachos, pero por las imágenes parece suficiente para “matarnos”.

La pregunta curiosa que ahora podríamos hacernos es la que sigue ¿Cómo se puede sobrevivir a una caída desde gran altura? Buscando la respuesta acabo de encontrar este excelente artículo “Cómo sobrevivir a una caida desde muy alto” en el que se nos aconseja como debemos caer y colocar el cuerpo en el momento de un impacto, algo que si lo hacemos bien aumentaría nuestras posibilidades en un porcentaje elevado, sobre todo si caemos sobre nieve, como sería el caso.

La lectura de este artículo me ha resultado del todo esclarecedora. Incluso creo que estoy capacitado para sobrevivir a una caída desde el Empire Golden Estate, y ya estoy deseando probarlo… En fin, aunque todo lo que se dice en ese artículo suena razonable, lo cierto es que para hacer uso de esas técnicas se necesita entrenamiento, sino a gritar como un poseso, a ver si Dios te escucha, no queda otra. Pero si ese artículo resulta curioso, más todavía este otro: ¿Podría un gato sobrevivir a una caida desde un rascacielos? Échale un vistazo.

Volviendo a la película, el protagonista impulsivo no tuvo mucha suerte, pues rompió las dos piernas. Me preguntó cuándo sería mejor saltar, si de noche o de día…, supongo que este detalle afectaría a la dureza del terreno, pero no se responderlo. De todas formas quedó demostrado que saltar era la peor opción. Del ostiazo después uno no estaría en condiciones de ir a ningún sitio, y mucho menos con una manada de lobos hambrientos rondando el lugar. Puede que la mejor opción fuese la del otro chico, es decir, deslizarse por el cable hasta llegar al poste, pero esto solo puede hacerlo alguien que esté en forma, como Rambo, que al no sentir las piernas se movería raudo y veloz. Aun así, mejor esto que tirarte directamente; al menos has intentado “algo”, y si te caes, pues te has caído, y punto. Luego ya, la forma en la que se salva la chica, pues típico final de película, poco o nada creíble, pero ahí está.

La pregunta: ¿Tú qué harías?


Frozen (2010). Bajo Cero.

Lo mejor: Genera tensión y angustia a partes iguales. La montaña y los parajes crean el ambiente propicio para ello.

Lo peor: Diálogos en ocasiones demasiado absurdos, trama poco original, y un inicio lento.

Veredicto: Adam Green tiene talento, ya lo demostró con Hatcher, y ahora, con Frozen. Si le das una oportunidad no te sorprenderá, pero seguro que pasas un mal rato.

FICHA: TÍTULO ORIGINAL: Frozen. TRADUCCIÓN: Bajo Cero. AÑO: 2010. PAÍS: Estados Unidos. DURACIÓN: 94 min. DIRECTOR: Adam Green. GUIÓN: Adam Green. MÚSICA: MarAndy Garfield. FOTOGRAFÍA: Will Barratt. REPARTO: Emma Bell, Shawn Ashmore, Kevin Zegers, Ed Ackerman, Rileah Vanderbilt, Kane Hodder, Adam Johnson, Chris York, Peder Melhuse. PRODUCTORA: Anchor Bay Films. GÉNERO: Terror / Thriller.

SINOPSIS: El argumento de Frozen nos presenta a dos locos por el snowboard, que van en el telesilla de una estación de esquí ambicionando la última bajada por la ladera antes de marchar a casa. De pronto, el telesilla se detiene por completo. Ni un alma alrededor. Todo empeora cuando las luces de la estación se apagan para no encenderse de nuevo hasta el próximo fin de semana. Entonces tendrán que hacer cosas impensables para poder sobrevivir a una muerte segura por congelación. Pero además, pronto se darán cuenta de que el frío no es su peor enemigo.

TRAILER:


Algunas Capturas de Imagen:

Frozen (2010). Bajo Cero

Frozen (2010). Bajo Cero

Frozen (2010). Bajo Cero

Frozen (2010). Bajo Cero

Frozen (2010). Bajo Cero

Frozen (2010). Bajo Cero

Frozen (2010). Bajo Cero

Frozen (2010). Bajo Cero

Frozen (2010). Bajo Cero