Dashiell Hammett y el hardboiled. Mujer fatal, versus detective cínico, mujeriego, y misógino. Todo a la vez
Últimamente, y cuando puedo, trato de revisar las películas de serie b clásicas, las de blanco y negro de toda la vida, sobre todo las de ciencia ficción. Sin embargo, anoche he decidido dar un pequeño giro, y adentrarme en el cine de John Huston, y lo hice con su primer trabajo, El Halcón Maltés. Ésta es una de esas muchas películas que he visto cuando era crio, y que nunca más había vuelto a ver, permaneciendo desde entonces en el mayor de los olvidos. Obviamente la perspectiva es completamente distinta, pues en el primer caso te limitas a disfrutarla como inocente espectador, y ahora, ya con unos cuantos años encima, más bien tratas de fijarte en los detalles y de establecer relaciones con los conocimientos que has adquirido, y que cuando eras niño simplemente no existían. De niño lo más parecido a la cosa pulp que yo conocía era el pulpo de los domingos «pulpo a feira», y que bueno que estaba (y que está). En aquello tiempos no estaba yo para muchas reflexiones
Me ha sorprendido y mucho la puesta en escena del personaje principal, el detective Sam Spade, magistralmente interpretado por Humphrey Bogart, aunque quizás eso de magistral sea pasarse un rato largo. A decir verdad, ahora en caliente no tengo clara ningún tipo de valoración. Y digo esto porque el personaje muestra una serie de reacciones que a veces cuesta asimilar, como es la indiferencia cuando conoce la muerte de su compañero, o algunos de los arrebatos repentinos que le pega. Hay que reconocer que no es fácil meterse en la piel de un detective extremadamente cínico y mujeriego, pero a la vez lo suficientemente misógino como para ser el ídolo de todo «pagafantas», real o en potencia. Memorable la frialdad con la que explica al espectador, ya en el tramo final, los motivos por los que enviará a la horca a la mujer de la que cree estar enamorado, saliendo airoso de las distintas intervenciones de ésta, apelando a sus sentimientos, a lo que el responde con un «cállate, ahora estoy hablando yo; luego hablarás tú». Todo el metraje, de principio a fin, está repleto de frases para enmarcar, y son tantas que apuntarlas todas me desbordaría. He tratado de buscar un buen listado de ellas en español, pero no lo he encontrado. Aquí tenéis uno bastante completo, pero en inglés: The Maltese Falcon, memorable quotes.
Siempre me han gustado las películas de detectives, bueno, más bien las series, porque películas no se me ocurren muchas, pero series…. Míticas fueron algunas como Magnum PI, Mike Hammer, Luz de Luna, o Colombo, aunque está claro que el rey de todos los detectives siempre es y será Sherlock Holmes. Una ingente producción de personajes, donde los más populares los encontramos tanto en el cine como en la televisión, y que bien podríamos repasar desde los más expeditivos en versión policía, como es el inspector Harry Callaham (Clint Eastwood), hasta la pareja de Expediente X, especializados en lo sobrenatural. Sin embargo, y por encima de todos, tenemos al detective privado como icono clásico; y hablar de detectives, de historias de detectives, es hablar de pulp genuino. El género detectivesco era el único género pulp capaz de abarcar todos los géneros posibles.
El Halcón Maltés ha pasado a la historia como una de las películas más conocidas de John Huston y Humphrey Bogart, cuyo guión se basaba en la novela negra de igual título escrita por Dashiell Hammett (1894 - 1961), uno de los autores pulp más relevantes por aquel entonces. Hammett había trabajado para la agencia de detectives Pinkerton, y esto le reportó importantes experiencias que seguramente encauzaron su obra literaria hacia la novela negra. Sus primeros trabajos se publicaron en la mítica revista pulp Black Mask, con el relato The Road Home (El Camino a Casa), en el año 1922 y bajo el seudónimo de Peter Collinson, iniciándose así una prestigiosa carrera llena de éxitos. Entre sus novelas más destacadas figuran Cosecha roja (Red Harvest, 1929) y La maldición de los Dain (The Dain curse, 1929), siendo sin embargo la más popular de todas (que no la mejor), El halcón maltés (The Maltese Falcon, 1930). Se considera a este autor, Dashiell Hammett como uno de los padres del hardboiled, subgénero dentro de la novela negra, eminentemente pulp, que se caracterizaba por su crudeza violenta y lasciva.
A priori, la propuesta que había presentado Huston a los estudios de la Warner, para producir la película basada en la novela de Hammett, podría parecer una apuesta sobre seguro, dada la enorme popularidad que había cosechado el pulp original, pero no lo era. Antes de la película de Huston ya existían otras dos versiones cinematográficas que habían resultado ser un rotundo fracaso. La primera había sido dirigida por Roy del Ruth en el año 1931, y la segunda por William Dieterle, en 1936. Sin embargo, Huston insistió solo como él sabía hacer, y al final logró convencer a la Warner para que la película se produjese en el año 1941.
Una de las condiciones impuestas por la Warner fue que el actor principal, encargado de dar vida al detective Sam Spade fuese George Raft, uno de los actores con más tirón comercial del momento, pero éste se negó, al no confiar en el proyecto. Fue entonces cuando Huston presentó su alternativa, arriesgándose por un actor semidesconocido, pero habitual en películas de serie b, en las que solía interpretar a gangsters o rateros de poca monta. Aquel actor se llamaba Humphrey Bogart, y el argumento que esgrimió Huston para convencer a los productores, fue el siguiente: «Nadie mejor que un criminal para interpretar al detective que mejor sabe cazar criminales». El éxito de la cinta, ya en su preestreno, fue incontestable.
Los críticos de cine, los de verdad, y no quien ahora escribe, dicen que está no es una buena película, sin embargo su importancia en la historia del cine es capital, por el hecho de establecer una serie de mitos que posteriormente y hasta nuestros días han sido repetidos hasta la saciedad, como son la definición de mujer fatal, y por extensión, todos los elementos que componen el hardboiled tan popular de las magazines pulp como Black Mask, pero que aún no habían encontrado su razón de ser en el mundo del celuloide, hasta que llegó John Huston y Humphrey Bogart, claro está.
El Halcón Maltés | The Falcon Maltese
Más información: Sam Spade; Dashiell Hammett; Black Mask Magazine